Hay piezas de puzzle que encajan a la perfección. Una escapada a la playa y nuestra persona favorita. Un atardecer y una cámara de fotos. El café y la leche. Y es que estos dos ingredientes ya se piensan juntos en muchas ocasiones. ¿Ha sabido superar esta combinación la prueba del tiempo? Nosotros decimos sí.
Café con leche,
una tendencia centenaria
Más del 70% de los coffee lovers españoles lo toman con leche. ¿Dónde surgió esta tendencia que cada vez gana más adeptos? Se cuenta que la primera vez oficial fue en 1660, cuando un embajador holandés en China quiso imitar la tradición de añadir leche al té. Parece que la tendencia volvió a Europa y de ahí al resto del mundo.
Desde entonces, las formas de preparar el café con leche han ido más allá de añadir unos milímetros templado, frío o caliente (o en forma de espuma) a nuestra taza de café favorito. Diferentes tipos de leche para el café han ido surigiendo… para quedarse.
Y todas ellas combinan con Barista Creations , la gama de cápsulas de café creada para unir los dos sabores sin perder las propiedades, tangibles e intangibles, de ambos ingredientes.
Café con leche de vaca
El clásico sigue siendo preparado con leche de vaca. Pero aún dentro de esta hay diferentes categorías. Un café con leche entera profundizará en el sabor del café y le dará un extra de cremosidad. Prueba a prepararlo con un Caramel Crème Brûlée y a disfrutar de la potencia del aroma a caramelo.
Si eres de café con espuma de leche, la semidesnatada es la idónea para prepararla. Pero si eres de leche desnatada, suele recomendarse para culminar una cómida algo más intensa. De esas que terminan con una sobremesa y un Chiaro, más suave. O, si eres de Vertuo, un Bianco Leggero.
En estos tipos de leche para el café también entra la leche sin lactosa, cada vez más popular. En este caso sigue la misma regla: entera para cafés con más cremosidad, semi para espuma, desnatada para un café más ligero.
Y vinieron muchos más.
Café con leche de…
Las variedades vegetales que se encuentran en el mercado son una opción ya no solo consumida por veganos y vegetarianos. Más y más personas se unen a este fenómeno de bebidas. Por ejemplo, la leche de soja, rica es proteínas y calcio, hace los cafés más ligeros. Un buen sustituto de la leche desnatada.
Si eres más de leche de avena, que sepas que estás incluyendo a tu cuerpo un protector del intestinto y una dosis extra de vitaminas B y E. Prepara un Vanilla Éclair o un Vanilla Custard Pie. Notarás el aroma intenso avainillado y dulce.
Para preparar un cappuccino se recomienda la leche de coco, que combinará este sabor tropical con el del café que prefieras. Y si hay algún consumidor de leche de arroz, que sepas que mantendrá todas las propiedades del café que decidas elegir, pues su sabor es el más suave de todas las bebidas vegetales.
Por último, pero una de las más populares, está la leche de almendras. Su dulzor hace que los cafés más intensos lo sean un poco menos. Por eso te recomendamos probarlo con Bianco Forte, un café Vertuo para intensas recetas con leche.
La unión hace la fuerza
No tengas dudas. Ni miedo. A la hora de prepararte un café con leche, Nespresso tiene infinitas posibilidades. Más allá del clásico mitad y mitad o manchado, puedes probar con multitud de ong recetas con café cuya base es esta mítica unión del café con leche . En espuma, a diferentes temperaturas, con diferentes sabores… El límite está en tu creatividad, en tu arte… y en tu forma de expresarlo.
