De la cima del mundo hasta los inspiradores desiertos de Oriente Medio, del gélido norte siberiano hasta las islas paradisiacas de los Mares del Sur, el paisaje de Asia está lleno de historias, de mitos y de sorpresas. Y el origen del café asiático participa en muchas de ellas, gracias a unos cuantos luchadores natos, los caficultores.
El caficultor de India y el caficultor de Indonesia guardan muchas cosas en común, pero la más importante es que su espíritu solo es comparable con su fuerza a la hora de trabajar. Es por ello que han seguido ofreciendo el mejor café posible sin renunciar a las tradiciones centenarias. ¿Quieres saber cómo?
El origen del café asiático entre mitos y leyendas
Viajamos hasta el Siglo XVII para descubrir que debemos las primeras páginas de esta aventura a Baba Budan, un viajero que, tras tomar prestados seis granos de café en la ciudad de Mocha, lo plantó en la ciudad de Chikamagalur, en India. Las dos variedades Robusta y Arábica crecieron en las densas selvas cercanas de la región.
Esta famosa historia trajo consigo un café único, el café Mysore (en referencia a una de las grandes ciudades de India). Y con el café, los encargados de salvaguardarlo, los caficultores. Algunos rezaban a Suria, dios hindú del Sol, otros a Indra, señor de los cielos y dador de lluvia, consiguiendo que esa variedad ya no fuera la única existente.
Las técnicas que conservamos de aquella época son artesanas, de meter las manos hasta el fondo de la tierra y recoger decenas de granos en un día. Técnicas sagradas, pero poco eficientes. Había que buscar una forma de conseguir mejorar el proceso del café sin comprometer las creencias y costumbres que recorrían todas las cosechas.
Instrumentos del futuro para conservar el legado del pasado
El Programa AAA de Nespresso llegó a las comunidades de cafetales en India e Indonesia para ofrecer a las cooperativas de agricultores una promesa de empoderamiento y apoyo. Si querían crecer, tenían que hacerlo correctamente. Por eso este Programa no es solo nuestro, es de cada uno de esos protagonistas que cumplen con los principios de calidad y sostenibilidad, que garantizan el futuro del café sin olvidar el futuro del planeta.
Es por ello que en la isla de Sumatra se sigue practicando el despergaminado húmedo, que facilita el proceso de secado al descascarillar los granos aún húmedos. O por qué en las regiones verdes de la India la monzonización, proceso por el cuál los granos recogen la humedad del Monzón, es la técnica que se practicaba hace cientos de años y sigue siendo efectiva en la actualidad.
El resultado son dos productos que más que representar, veneran el origen del café asiático, son la muestra maestra. Master Origin India es ese café intenso con notas aromáticas a especias tan características de su región. Un festival de sensaciones que inspira largometrajes en Bollywood. Master Origin Indonesia es, además de fairtrade, un café con densas notas aterciopeladas y amaderadas. Naturaleza en estado puro.
El verdadero héroe de toda Asia
Ni samuráis ni soldados imperiales, el guerrero más feroz que ha pisado territorio asiático es el caficultor, capaz de transmitir su espíritu de generación en generación. Desde Baba Budan hasta las grandes cooperativas del Siglo XXI hay millones de anécdotas, pero todas conservan esa magia centenaria que se transmite del campo a cada cápsula de café.
El Programa AAA es solo la chispa que ellos necesitan, los verdaderos protagonistas, artesanos de materias primas y guardas del despertar de muchas personas. El origen del café asiático sigue vivo en cada uno de ellos.
